Las hojas de Moringa incluyen proteína vegetal completa, con los 9 aminoácidos esenciales que necesita nuestro organismo.

Junto a ellos aportan vitaminas A, E, K; vitamina C (15,2mg /100g) y vitamina B12 (cianocobalamina) en 18,6 mcg/100g, junto con B9 (ácido fólico) y B1, que ayudan al proceso metabólico de la células.

También brindan un rico elenco de minerales esenciales: calcio, magnesio, hierro, fosforo, potasio y zinc, además de carbohidratos complejos, de absorción lenta, y ácidos grasos monoinsaturados, que entre otras propiedades disminuyen el colesterol LDL, el “malo”.

Las hojas de Moringa contienen más vitamina A que las zanahorias, más calcio que la leche, más hierro que espinacas, más vitamina C que las naranjas, y más potasio que los plátanos. Así mismo, la calidad de las proteínas de las hojas de Moringa rivaliza, e incluso supera, a la leche y los huevos (Fahey, 2005).

Cabe destacar que el aporte antioxidante de la Yguá Moringa es 14 veces superior al del arándano y 100 veces el del té verde. Medido el ORAC (capacidad antioxidante de los alimentos), supera los 131.000 μmol.

Sanie Mirella Rodriguez Núñez es, a sus 12 años de edad, una gran conocedora de la Moringa, por ser parte de la Familia Yguá. En apenas un minuto te va a explicar las propiedades nutricionales de este alimento funcional